La Ciudad tuvo en 2022 la más baja cantidad de homicidios en 28 años, de acuerdo a información preliminar que surge del Mapa del Delito. Este es el resultado de una política implementada a partir de 2017 cuando se creó el Sistema Integral de Seguridad Pública que permitió desarrollar un método de trabajo moderno para unificar la lucha contra el delito.
El anuncio lo hizo el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, quien estuvo acompañado por el ministro de Justicia y Seguridad, Marcelo D’Alessandro, el secretario de Asuntos Públicos, Waldo Wolff, y el jefe de la Policía de la Ciudad, Gabriel Oscar Berard.
“Año tras año bajan los delitos en la Ciudad. A partir de una acción conjunta, hoy somos la segunda capital más segura de toda América. La seguridad, lo decimos siempre, es una prioridad para nosotros. Trabajamos con una estrategia en la ejecución de un plan integral y acá están los resultados”, detalló Felipe Miguel.
Más policías en las calles, capacitación, equipamiento, tecnología, cercanía con la gente y control de gestión civil fueron determinantes para mejorar la seguridad de los vecinos.
Buenos Aires se convierte así en la Ciudad capital más segura de América Latina, y la segunda del continente, después de Ottawa (Canadá).
“Presentar estos datos nos llena de orgullo y nos marca que estamos en el camino correcto. Asumimos el compromiso mientras otros miraban para un costado. Cuando no hay seguridad, se pierde el derecho. Trabajamos para devolverle la libertad a los vecinos y a las millones de personas que entran a diario a la Ciudad”, agregó D’Alessandro.
Los datos de 2022 se comparan con los de 2019, último año de normalidad antes de la pandemia, y con 2016 cuando arrancó la gestión del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Tanto en 2020 como en 2021 hubo una baja en la cantidad de delitos por la propia pandemia y la fuerte restricción en la circulación.
“Los datos anulan el relato. Las estadísticas son contundentes y marcan que cambió el paradigma de seguridad ciudadana no solo en la Argentina sino en Latinoamérica, con récord positivo en la baja de los delitos complejos”, detalló Wolff.
Durante el primer trimestre de 2023 habrá una auditoria para evaluar en forma definitiva los resultados preliminares. Esta será otra fuente alternativa que analizará la tendencia delictiva.
En 2022 los homicidios dolosos bajaron 14% respecto a 2019, y 40% comparándolos a 2016. Hubo 88 contra 103 de 2021; 127 de 2020; y 102 de 2019. Por primera vez desde 1995 se registró menos de 100 muertos en un año.
La tasa de homicidios cada 100 mil habitantes en 2022 se ubicó en 2,86. No estaba por debajo de 3 desde 1995.
En 2022 los femicidios bajaron 50% respecto a 2019 (5 víctimas en 2022 y 10 en 2019), y 67% respecto a 2021 (15). Es una de las tasas de femicidios sobre 100 mil mujeres más bajas del país: 0,31, frente a un promedio nacional de 0,99 en 2021, según la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
En el barrio 31 y 31 Bis, cuya seguridad la maneja la Ciudad, los homicidios bajaron 64% y pasaron de 14 en 2019 a 5 en 2022. Mientras que en el barrio 1.11.14/ Rivadavia/Illia, a cargo de las fuerzas federales, los homicidios pasaron de 5 en 2019 a 14 en 2022, lo que representa un aumento del 180%.
En 2022, los robos bajaron 10% en relación a 2019. De hoy a 2016, tuvieron una caída del 20%.
¿Qué es el Mapa del Delito?
El Mapa del Delito fue dispuesto mediante la Ley 5.688 que creó el Sistema Integral de Seguridad Pública porteño y a la Policía de la Ciudad. Constituye una herramienta de gestión dirigida a la recopilación, procesamiento y análisis de la información concerniente a las actividades delictivas que se desarrollan en la Ciudad.
Se publica anualmente y lo realiza la Subsecretaría de Seguridad Comunal e Investigación Criminal del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad.
El Mapa del Delito tiene por finalidad:
- Avanzar en la elaboración de un diagnóstico certero de las causas y procesos que confluyen en los hechos delictivos registrados en las distintas comunas.
- Contribuir a la elaboración de estrategias de prevención y conjuración del delito.
- Promover un direccionamiento estratégico de los recursos humanos y logísticos de los servicios de seguridad.
- Favorecer una respuesta oportuna a los requerimientos de la población en materia de seguridad.