Ante la resolución de la Justicia que habilita el funcionamiento provisorio de dos turbinas de la “Central Matheu III”, ubicada en la localidad de Villa Rosa del Partido de Pilar, la Municipalidad de Escobar deja sentada su posición públicamente y en tres escritos dirigidos al Ministerio de Ambiente de la Provincia (ex OPDS), a la Municipalidad de Pilar y al juez interviniente, firmado por la intendenta interina Verónica Sabena, en donde hace saber su más enfático rechazo a tal decisión. La presentación se realiza, en particular, en defensa de los vecinos y vecinas de la localidad de Matheu, ubicados a pocos metros del límite con el partido de Pilar. Y en general, pensando en los daños al ambiente que esa actividad produce.
A su vez, la Municipalidad de Escobar deja expresa reserva de articular las acciones legales pertinentes para evitar y prevenir sucesos que puedan afectar los derechos de los vecinos y vecinas del distrito escobarense.
Matheu II y Matheu III son dos usinas de generación termoeléctrica. Están catalogadas como industrias categoría 3, peligrosas desde el punto de vista ambiental. Las mismas se instalaron en 2016 en una zona de Villa Rosa, Pilar, que entonces estaba catalogada como residencial. El intendente de ese entonces, Nicolás Ducoté, les otorgó una excepción al código urbano y luego, en una reforma integral muy criticada por los vecinos, rezonificó el predio como de uso industrial.
Una de las centrales, operada por APR, anunció en 2022 su retirada y desmantelamiento. Hoy solo queda Matheu III, operada por Araucaria. Cabe destacar que, en agosto de 2020, se logró la clausura de la misma gracias a las gestiones conjuntas de los intendentes Ariel Sujarchuk y Federico Achával ante el gobierno bonaerense de Axel Kicillof y el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS). La medida fue concretada en base a las mediciones auditadas por funcionarios de la OPDS que constataron la contaminación sonora generada por la central termoeléctrica, algo que vecinos de Escobar y Pilar venían denunciando desde la polémica puesta en funcionamiento de la empresa en 2018, cuando la provincia de Buenos Aires era gobernada por María Eugenia Vidal. En esa oportunidad, la justicia de primera y segunda instancia dio por acreditados los potenciales efectos nocivos para la salud y el ambiente que podrían generar las termoeléctricas y los cinco millones de litros diarios tomados del acuífero Puelche que requerirían su funcionamiento.
Sin embargo, el 23 de enero de 2023, la Justicia entiende que con el retiro de una de las centrales y con la puesta en funcionamiento de solo dos turbinas están dadas las condiciones como modificar la medida cautelar que en su momento ordenaba a la empresa Araucaria Energy S.A. suspender la construcción, operación, ensayos de prueba y demás actividades de la central termoeléctrica en cuestión.
La Municipalidad de Escobar expresa en sus presentaciones el rechazo a la resolución dejando en claro que hará todo a su alcance para impedir que la central vuelva a funcionar.