Así lo manifestó en las últimas horas en gobernador Axel Kicillof en el marco de un encuentro que se llevó a cabo entre referentes del peronismo opositor para dialogar acerca del paro del 24.
El DNU 70 y la Ley Ómnibus son la apuesta central del presidente Javier Milei en el inicio de su gestión. Busca apurar su tratamiento y amenaza con un ajuste mayor si no se lleva a cabo. Del otro lado de la grieta política, Axel Kicillof encabezó hoy una cumbre del peronismo opositor para coordinar el intento de frenar ambas iniciativas, tras la cual se ratificó el apoyo del sector al paro del jueves 24 y se pidió “reflexionar” sobre el rumbo económico al primer mandatario.
“El Presidente dijo que que si no se aprobaba la Ley no iba a haber plata para las provincia. Lo rechazamos completamente”, dijo Kicillof al término del encuentro, del que hizo de portavoz, junto al triunviro de la CGT Héctor Daer y al senador kirchnerista José Mayans. “Apoyamos y acompañamos la medida de la CGT”, agregó el gobernador bonaerense.
La reunión se realizó en la Casa de la Provincia en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en la cual Kicillof hizo de anfitrión de buena parte de la primera planta del peronismo opositor. Entre otros, dijeron presente los gobernadores de La Rioja, Ricardo Quintela y de Tierra del Fuego, Gustavo Melella. Vía web se sumaron Sergio Ziliotto (La Pampa), Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Raúl Jalil (Catamarca).
“Esta fue una convocatoria para repasar la situación económica tras de la batería de medidas que tomó el Gobierno Nacional y que han afectado a prácticamente todos los sectores”, señaló Kicillof y agregó: “Se está llevando adelante un plan de ajuste con absoluta insensibilidad y sin compensar de ninguna manera el impacto negativo sobre los trabajadores y los sectores medios”.
Además, el gobernador bonaerense subrayó que “hoy lo que tenemos que hacer es acompañar a los que más están sufriendo, por eso vamos apoyar la movilización que llevarán adelante las centrales obreras la semana que viene”. “No entraremos en ninguna provocación: vamos a hacer aquello para lo que tenemos legitimidad, que es defender a nuestro pueblo”, concluyó.
Daer por su parte rechazó el anuncio del gobierno nacional sobre descontar el día de trabajo a los empleados estatales que se suman al paro. “Son discursos para tratar de minimizar la movilización, nosotros vamos a marcar en defensa de los derechos”, dijo el líder de la CGT. Además de Daer, completaron la presencia sindical, entre otros Pablo Moyano (Camioneros), Abel Furán (UOM) , Hugo Godoy (CTA Autónoma) y Roberto Baradel (SUTEBA).
Hay que sumar al presidente del bloque de Diputados, Germán Martínez, junto a varios diputados y senadores. Y a ministro del gabinete bonaerense, entre ellos los de Gobierno, Carlos Bianco; de Desarrollo Social, Andrés Larroque; de Trabajo, Walter Correa y de Infraestructura, Gabriel Katopodis. Y a varios intendentes bonaerenses.
Por el volumen de las presencias se trata de uno de los gestos políticos más importantes del peronismo opositor hasta el momento. Kicillof aprovechó para alertar sobre los efectos de la “devaluación” y el “aumento de alimentos, combustible, medicamentos y prepagas”, además de los “tarifazos que se vienen”. En ese marco, sostuvo que hay “preocupación” por los “jubilados, los trabajadores y los que se están quedando sin trabajo”.
Al respecto, indicó que los distintos sectores de UxP analizaron “de qué manera se puede articular algún tipo de solidaridad y repuesta” a esos sectores aunque aclaró que las soluciones “dependen del Gobierno nacional porque estas políticas fueron muy duras y no tuvieron ningún tipo de compensación”. Y aclaró que no adelantaría la estrategia parlamentaria porque esa es una atribución de los “legisladores” de UxP.