El dengue, una enfermedad viral propagada por el mosquito Aedes aegypti en la región, continúa siendo una inquietud para las autoridades sanitarias debido a la evidencia respaldada por datos.
Según el más reciente informe epidemiológico nacional, desde finales de julio de 2023 hasta principios de marzo de 2024, se registraron 120.007 casos de dengue en total.
Además, se reportaron 248 casos de dengue grave, lo que representa el 0.20% de los casos.
En tanto, hubo 69 muertes relacionadas con la enfermedad en ese mismo período. La información fue proporcionada por el Ministerio de Salud de la Nación en su último informe.
En Quilmes se confirmaron 1.604 casos, en Florencio Varela 1.013, en Lomas de Zamora 1.912, Lanús 2.096, Avellaneda 859, Berazategui 452 y La Matanza 2.279. Además, se reportaron 18 personas fallecidas por la enfermedad en la Provincia, de los cuales 3 murieron en Lomas de Zamora, 2 en Berazategui, 1 en Avellaneda y 1 Florencio Varela.
Los municipios con mayores tasas de incidencia son José C. Paz, Lanús, San Miguel, San Isidro, General San Martín, Lomas de Zamora, Avellaneda, Quilmes, Tres de Febrero y Morón.
Por su parte, el ministerio de Salud insistió en la necesidad de fortalecer los cuidados en las casas para prevenir el dengue y el aumento de casos, ya que las lluvias y el clima húmedo generan condiciones ambientales favorables para la proliferación del mosquito trasmisor del virus. Por eso, tras varios días de precipitaciones en la Provincia, pide a la población vaciar todo tipo de recipiente que acumule agua para evitar su propagación.
Recordemos que el Aedes aegypti tiene hábitos domiciliarios y se reproduce en cualquier recipiente natural o artificial que contenga agua. Sus huevos pueden resistir las condiciones ambientales secas durante más de un año, siendo esta una de las estrategias más importantes que la especie emplea para sobrevivir y propagarse.
Por esta razón, las medidas de prevención más efectivas apuntan a la eliminación de objetos que puedan acumular agua, especialmente aquellos que quedan a la intemperie y acumulan agua de lluvia, como puede haber sucedido en estos días; además del control de aquellos contenedores de agua necesarios (tales como los bebederos de animales, floreros, etc.).