El peso argentino sigue perdiendo valor frente al dólar y la alta tasa de inflación sumado a la incertidumbre económica y política que se vive en el país, continúan debilitando la moneda local. Pero el impacto no solo se siente dentro del país, sino que también se traslada a países vecinos como Uruguay. La cotización del dólar en Montevideo supera los 1.000 pesos argentinos, más del doble de lo que cuesta comprar un billete estadounidense en el microcentro porteño.
De esta manera, la cotización del dólar en Uruguay es más alta que la de los dólares financieros como el MEP y el CCL, así como la del llamado dólar “Tarjeta” o “Qatar“. Esto significa que los turistas que viajen a Uruguay con pesos argentinos tendrán que pagar entre 804 y 1.010 pesos por cada dólar estadounidense.
Los principales factores detrás de esta situación son la inestabilidad del peso argentino, la escasez de reservas en el Banco Central, la escalada del dólar libre y la volatilidad que traen las elecciones presidenciales. Diversos economistas pronostican una inflación del 120% para todo el 2023, lo que agrava aún más la situación.
Esta realidad ha generado que el peso argentino sea mal visto en el exterior y su valor se deprecie cada vez más. Las casas de cambio y bancos “charrúas” siempre tuvieron un precio implícito mucho más alto en pesos argentinos para adquirir dólares estadounidenses que las casas de cambio uruguayas. Sin embargo, tras la corrida cambiaria de la semana pasada, la cotización de las casas de cambio se emparejó con la de los bancos.