Argentina se convirtió en el primer país en regular el marcado de las artes de pesca de arrastre. La Subsecretaría de Pesca estableció que todos los buques arrastreros deben identificar los aparejos de pesca para contar con datos precisos de estos elementos abandonados, perdidos o descartados, según la disposición 4/2023 de la Dirección Nacional de Coordinación y Fiscalización Pesquera publicada hoy en el Boletín Oficial.
La medida tiene como objetivo reducir el impacto medioambiental de la actividad, según destacó la Dirección a través de un comunicado. El organismo de fiscalización pesquera explicó que la actividad pesquera no es una de las principales fuentes de contaminación por plásticos hacia los océanos, pero su uso directo en el ecosistema acuático afecta al medio ambiente. Por lo tanto, se requiere una acción al respecto.
La presente disposición exige a las empresas armadoras de buques arrastreros marcar sus artes de pesca y, en caso de pérdida o abandono de las mismas, informarlo en el parte de pesca electrónico de la marea correspondiente. Según el director nacional de Coordinación y Fiscalización Pesquera, Julián Suárez, “poner en vigencia esta disposición nos permite tomar conciencia del impacto, y saber fehacientemente la cantidad de elementos plásticos perdidos o descartados en el mar provenientes de la actividad pesquera“. La disposición es una medida importante en la lucha contra la pesca desregulada y su impacto medioambiental.
La Dirección Nacional de Coordinación y Fiscalización Pesquera convocó a mesas de diálogo con distintos actores del sector para poder desarrollar la presente medida de administración desde 2022. Como resultado, se elaboró un sistema de marcado de aparejos de pesca, adaptado a la situación particular que presenta cada uno que utiliza la flota nacional, los materiales que los componen, su vida útil y la dinámica de fabricación de las artes con sus correspondientes actores, como son los fabricantes, proveedores, rederos, armadores, capitanes y recicladores, entre otros.