En un emotivo acto, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, acompañó a su homólogo boliviano, Luis Arce, en la inauguración del electroducto Juana Azurduy de Padilla, un hito que marca la primera conexión de energía eléctrica entre ambos países. Durante el evento, ambos mandatarios destacaron la profunda hermandad y valores compartidos que unen a Argentina y Bolivia.
Fernández expresó su visión común con Arce al afirmar: “Compartimos la visión de promover la igualdad y la justicia en nuestros países, así como el compromiso de preservar el Estado de derecho, promover la unidad de las fuerzas populares y construir una América Latina integrada”. El presidente argentino también destacó la ayuda brindada por Bolivia en momentos difíciles, enfatizando el apoyo recibido en el suministro de gas cuando fue necesario.
Además, Fernández elogió el trabajo realizado por las autoridades bolivianas en la construcción del electroducto, resaltando que es una muestra del compromiso del gobierno de Bolivia con el progreso de América del Sur y su contribución al suministro de energía en Argentina. Esta iniciativa, que representa la primera conexión eléctrica internacional boliviana, permitirá que Bolivia se conecte al sistema de transporte de alta tensión y deje de ser el único país limítrofe con Argentina que no estaba incorporado a esta red.
El presidente argentino enfatizó que esta obra no solo beneficiará a las familias argentinas, sino también a la industria del país, generando empleo y brindando tranquilidad a las familias. Destacó el compromiso de su administración para impulsar la creación de puestos de trabajo y asegurar el suministro de energía a las empresas incluso en momentos difíciles.
Fernández y Arce coincidieron en la importancia de revitalizar la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), destacando su compromiso para poner en marcha nuevamente este organismo plurinacional. El presidente argentino criticó el proceso de “desintegración” que la organización experimentó durante la presidencia de Donald Trump en Estados Unidos, así como el apoyo de la Organización de Estados Americanos al golpe cívico-militar contra el Gobierno de Evo Morales en 2019.
En un gesto de fraternidad, Fernández manifestó su solidaridad y apoyo incondicional a Bolivia, afirmando que estaría dispuesto a brindar toda la ayuda necesaria. Por su parte, Arce resaltó los lazos históricos y la hermandad entre ambos países, subrayando la importancia de trabajar juntos para mejorar la calidad de vida de los bolivianos y los argentinos.
Tras el acto inaugural, los presidentes sostuvieron una reunión bilateral en la que repasaron los acuerdos suscritos y reafirmaron el interés de ambos países en desarrollar proyectos conjuntos que impulsen la cadena de valor de minerales como el litio, promoviendo la exportación de productos con valor agregado y fomentando la capacitación técnica y científica.
La inauguración del electroducto Juana Azurduy de Padilla marca un hito en la relación entre Argentina y Bolivia, fortaleciendo los lazos de hermandad y colaboración en el ámbito energético y bilateral.