Se trata de una suspensión “transitoria” de la línea de crédito en el marco de la emergencia económica decretada tras la asunción de Javier Milei
Con la singular excusa de buscar el “resguardo de la rentabilidad del Fondo” de Garantía de Sustentabilidad (FGS)”, el Ejecutivo dio de baja los créditos
El gobierno de Javier Milei suspendió la vigencia de los Créditos Anses, la iniciativa le daba posibilidad que jubilados, pensionados, personas de bajos recursos y trabajadores en relación de dependencia accedieran a fondos que podían devolver en cuotas a muy baja tasa de interés, respecto de las que ofrece el mercado
La medida fue enmarcada en la supuesta “emergencia pública en materia económica, financiera, fiscal, administrativa, previsional” etcétera declarada en el cuestionado DNU 70/2023, cuya vigencia sigue pendiendo del hilo de los poderes Legislativo y Judicial.
Según la extravagancia de uno de los considerandos, los créditos no podrían seguir vigentes “ante la severidad de la crisis que atraviesa el país en el entendimiento del riesgo para la subsistencia de la organización social, jurídica y política que afecta el normal desarrollo en procura del bien común”.
Con esos justificativos, la resolución sostiene que la vigencia del Programa de Créditos Anses “debe ser realizada considerando el contexto económico del país que torna dificultoso ponderar el índice inflacionario de los próximos meses, así como la tasa de interés a aplicar dentro del mercado de préstamos personales”.Luego insiste la suspensión de ese beneficio es “una medida preventiva en resguardo de la rentabilidad del fondo, y con el fin de privilegiar la liquidez del mismo”.
En cambio, las argumentaciones de la resolución 1/2024 de la administración Milei son una letanía de adjetivos negativos y advertencias tremendistas. Por ejemplo, para justificar la eliminación de los créditos llega a decir que la “enorme gravedad social” del momento está atravesada por “altísimos índices de pobreza e indigencia, con especial impacto en la niñez y deterioro de los salarios reales, ayudas sociales y haberes previsionales”.
No aclara que esta situación se agravó luego del ajuste anunciado por el gobierno de Milei que, entre otra cuestiones, aplicó una devaluación de más del 100 por ciento que deterioró los ingresos y multiplicó la inflación.“La situación de la Argentina es extremadamente crítica y de una emergencia sin precedentes en nuestra historia”, añade la medida, en otra justificación que no se sustenta ni en la comparación con la historia reciente de los últimos 25 años.
La resolución resaltó que la medida de interrupción de los créditos es “temporal” hasta que “se estabilicen las variables económicas”, lo que permitirá que “puedan evaluarse las condiciones financieras vigentes y los ajustes que eventualmente correspondan efectuar dentro del programa”.
El anuncio de la ampliación del programa de financiamiento había sido realizado por Massa y Raverta el pasado 1 de noviembre, unos pocos días antes del balotaje del 19 del mismo mes, con el objetivo de inyectar recursos en los sectores más afectados por la inflación y la crisis económica.