Boca continúa de romance con los penales. Cuenta con un arquero especialista como Sergio Chiquito Romero que atajó 10 de los 19 que le ejecutaron en el Xeneize y así sigue avanzando en las competencias: Libertadores y Copa Argentina.


En la Libertadores llegó hasta esa forma de definición frente a Nacional de Uruguay en octavos y con Racing en cuarto de final; allí fue determinante su arquero en la tanda de 12 pasos como también lo fue para evitar un papelón y así poder dejar atrás a Almagro y colocarse en los cuartos de final de la Copa Argentina.


“Boca juega mal, ¿qué querés que te diga? Llega por penales. ¿Cuántos partidos ganó Boca? Se respeta, pero no me vengan a decir que juega bien. No le ganó ni a Almagro”, disparó el Beto Alonso, ídolo riverplatense hace unos días.


Más allá de las camisetas con las que se analice el tema. ¿Tiene razón el Beto? Hasta el momento ¿El rendimiento de Boca estuvo a la altura de un equipo semifinalista de la Libertadores o para superar sin apremios a un débil rival que pena por mantenerse en la Primera Nacional? El equipo que conduce Jorge Almirón no da garantías de lograr un buen nivel en instancias decisivas de competencia, a pesar de contar con un plantel con varias figuras.


Las expectativas de Boca están puestas en lo externo: su historia, hinchada, Bombonera y todo lo que puede hacer pesar desde afuera del campo de juego para jugar ante un equipo de la envergadura de Palmeiras de Brasil.


La confianza que se puede lograr la Séptima también pude alimentarse desde la histórica relación entre Boca y la definición por penales, desde allí consiguió triunfos relevantes como fueron haber ganado finales internacionales: Libertadores 1977, Supercopa 1989, Libertadores 2000, Libertadores 20001, Intercontinental 2003, Sudamericana 2005.

Boca es el equipo con más tandas (15) en la Copa Libertadores y el que más ganó (10). En lo que respecta a Copa Argentina, Boca ganó 9 de las 11 definiciones en las que participó.


Por ahora tiene todos estos datos, en el arco tiene un verdadero “ataja-penales” y el viento a su favor, si hasta los pibes de la Sub 20 se consagraron campeones del mundo el pasado sábado tras ganarle por penales al AZ Alkmaar de Países Bajos.


Pero si Boca no encuentra rápido su juego no le va alcanzar con lo exterior. Necesitará argumentos deportivos que por el momento no se le vieron, porque el romance con los penales se puede terminar en cualquier momento.

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