A partir de este lunes, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) del Gobierno argentino ha levantado la prohibición de exportar todos los cortes de carne bovina, incluyendo los conocidos como “cortes populares” o “cortes parrilleros”. Esta medida revierte las restricciones establecidas por el gobierno anterior para contener los aumentos de precios en el mercado interno.
La prohibición, implementada mediante el Decreto 911/21, que afectaba a cortes como asado, falda, matambre, tapa de asado, nalga, paleta y vacío, finalizó el 31 de diciembre. La administración actual, liderada por el presidente Javier Milei, optó por no prorrogar la restricción, permitiendo la libre exportación de estos cortes.
La medida anterior, impulsada por el expresidente Alberto Fernández, buscaba limitar las exportaciones para asegurar el abastecimiento interno y contener los precios de la carne en el mercado local. Sin embargo, la actual administración ha decidido revertir esta política.
La restricción también incluía la prohibición de exportar reses enteras, medias reses y otros cortes con hueso. El levantamiento de estas limitaciones abre la posibilidad de que los productores de carne en Argentina expandan sus operaciones de exportación y aprovechen los mercados internacionales.